Mucho más que comunicación

 “Se entiende por proceso de codificación-decodificación aquella sucesión de procedimientos operativos de un sistema de transmisión de señales que se inicia cuando se selecciona en un punto A una secuencia de señales pertenecientes a un repertorio limitado de éstas, y concluye cuando en un punto B, se identifica la secuencia de señales seleccionadas en A”, establece José L. Piñuel Raigada en su análisis crítico del proceso de codificación y decodificación.

  En otras palabras, el catedrático universitario de la Universidad Complutense de Madrid propone que dicho proceso se debe a la emisión e interpretación de mensajes por los seres humanos. En la codificación, el ser mejor conocido como EGO elige al individuo o al ALTER con el que pretende comunicarse, teniendo el poder de estimular sensorialmente a la persona y seleccionar el método que va a utilizar para emitir el mensaje. Por lo contrario, ALTER tiene la capacidad de reaccionar a la causa de la estimulación sensorial y puede identificar y descifrar lo que el EGO intenta informarle. En términos más sencillos, este proceso simula la acción existente entre el emisor y el receptor.

     Para todo proceso en general, siempre existen reglas y leyes que regulan el proceso. En el caso de la codificación y la decodificación el llamado código es el responsable de regular la transmisión de dicho mensaje y diferenciarlo (redundancia) de otros en particular.

    La dinámica entre EGO y ALTER la podemos observar a diario. Desde una pequeña conversación entre dos amigos hasta una corporación comunicándose con sus miles de empleados. La codificación y la decodificación no tiene límites, ya que aunque representa la forma más básica de comunicación, tiene el potencial de ser empleada en todo modelo que desee emitir algún tipo de mensaje.

    Dicho proceso es meramente  exclusivo de los sistemas de comunicación humana, ya que nosotros, a diferencia de los animales tenemos la capacidad de utilizar el lenguaje con palabras y signos como vía comunicativa. La comunicación humana se basa en que las personas por naturaleza somos seres sociales que necesitamos de interacción para subsistir.

    La cultura, la sociedad, la política y la psicología contribuyen al desarrollo del ser humano y catalogan la comunicación en diversos sistemas con el propósito de vincular la codificación y decodificación de un mensaje. El sistema social, comunicación y ecológico catalogan la interacción humana y nos permite comprender como de forma estructurada y organizada los ejecutantes de un mensaje logran agruparse bajo diversos sistemas, formando parte de una sola sociedad.

    Haciendo referencia a la lectura Sistema de representaciones, Piñuel busca el por que los seres humanos tenemos la capacidad de controlar nuestros actos a diferencia del los diversos estímulos que provoca el entorno en donde vivimos. Las representaciones se basan en la capacidad que tienen los humanos de aprender y de evolucionar, restándole importancia a reacciones al entorno debido a la predisposición genética. Al considerar estudios de relaciones evolutivas y las etapas del desarrollo humano, la comunicación tiene como efecto el crecimiento y el cambio de identidad en el ser que lo lleva a comprender las razones tras su conducta y su forma única de ver el mundo.

    Las experiencias de un ser humano son “intransferibles” ya que más nadie va a tener la capacidad de comprender o pensar de la misma forma que dicho ser, que viene como consecuencia de su actividad cognitiva. La variedad humana es tan perfecta que dos seres jamás y nunca serán una copia exacta uno del otro ya que aunque seamos criado dentro del mismo entorno, cada cual posee su psiquis e interpretaciones de las experiencias vividas únicas en su clase.

   “Una cosa es “saber comunicarse” y otra “saber de comunicación””, explica Piñuel en su Ensayo general sobe la comunicación. Cómo comenté en mí análisis de la primera unidad, el haber tomado una clase de biología, no te hace conocedor de la medicina. Para evitarnos riegos y fracasos, existe un saber práctico (reflexivo) que nos ayuda a identificar el potencial conflicto que puede surgir a la hora de actuar.

     La Teoría de la Comunicación conlleva mucho más que saber comunicarse, es una ciencia que estudia de donde proviene las vías de comunicación desde los más remotos tiempos hasta los avances tecnológicos que tenemos la oportunidad de presenciar hoy en día.

    La comunicación no es tema sencillo, ya que constituye diversos campos de estudios como la biología, la psicología, la sociología, etc. y se acoplan bajo una mismo campo: la comunicación. La clase de Teoría de la Comunicación me ha permitido ver mucho más allá que el simple acto de trasmitir y recibir un mensaje. Las comunicaciones están representadas por doquier y constituyen lo que es la interrelación del ser humano a diario. Todo este aprender es mucho más que comunicación, es el estar concientes de que una palabra, un gesto o una idea que emitamos tiene el potencial de afectar significativamente la sociedad donde vivimos, dejando nuestra huella plasmada en el vinculo que conlleva la cultura y la comunicación.